Escrito por: Manuel Romero | Director de Diagnóstico y Operaciones
Las empresas familiares son una parte fundamental de la economía en América Latina. Sin embargo, a menudo enfrentan desafíos únicos en comparación con las empresas no familiares. Uno de estos desafíos es su plan de sucesión y el establecimiento de protocolos familiares en sus estrategias.
Dados los puntos anteriores, es importante que las empresas familiares planifiquen su Protocolo Familiar y Plan de Sucesión.
El plan de sucesión determina cómo se transferirán los activos y las responsabilidades de un negocio familiar de una generación a otra. Esto puede ser un proceso complejo, ya que no solo se trata de la transferencia de activos, sino también de la transferencia de valores, cultura empresarial, legado familiar y estilo de liderazgo.
Establecer protocolos familiares es importante para asegurar que la comunicación y la toma de decisiones en el negocio familiar sean claras y efectivas. Esto puede incluir el establecimiento de reglas claras para la participación de los miembros de la familia en la empresa, cómo se tomarán decisiones importantes y cómo se resolverán conflictos.
Los empresarios latinoamericanos con los que hemos trabajado por más de 30 años, creadores de compañías, son visionarios que vieron oportunidades en países en condiciones retadoras en cuanto a aspectos sociales, políticos, económicos y culturales. Estos empresarios han crecido sus organizaciones con ambición y determinación y han sobrellevado crisis en un mundo que les es cada vez más competido.
En conclusión, su empresa es un “hijo” más que han visto crecer y desarrollarse y por este motivo, les es difícil entregar a la siguiente generación el mando de la compañía.
Por estos motivos, lo más importante de la creación del protocolo familiar y el plan de sucesión es preservar la familia y la empresa.
No realizar un protocolo familiar ni un plan de sucesión puede tener graves consecuencias para las empresas familiares. Aquí hay algunos de los riesgos más importantes:
Si no se tiene un plan claro para la transferencia de activos y responsabilidades de una generación a otra, puede haber una interrupción en la operación del negocio, lo que puede tener un impacto negativo en la continuidad de la empresa.
Si no se establecen reglas claras para la participación de los miembros de la familia en la empresa y la toma de decisiones, puede haber conflictos y tensiones entre ellos, lo que puede dañar la dinámica familiar y la operación del negocio.
Si no se planifica la transferencia de valores y cultura familiares, puede haber una pérdida de identidad y cohesión en la empresa y la familia, lo que puede tener un impacto negativo en la continuidad y la calidad del negocio.
Si no hay una comunicación clara y un acuerdo sobre cómo se deben tomar decisiones y resolver conflictos, puede haber una ineficiencia en la toma de decisiones y un aumento de la incertidumbre en la operación de la empresa.
Si no se tiene un plan claro para la transferencia de activos y responsabilidades, puede haber desacuerdos legales entre los miembros de la familia, lo que puede tener un impacto negativo en la continuidad de la organización.
En resumen, no ejecutar el plan de sucesión puede tener graves consecuencias para la continuidad, la dinámica familiar y la eficiencia de la empresa. Por lo tanto, es importante que las empresas familiares aborden estos desafíos y tomen medidas para garantizar la continuidad y el éxito a largo plazo de su negocio.
London Consulting Group ha apoyado a cientos de empresas familiares en diversos rubros, especialmente en América Latina, ayudando a los empresarios, no solo a optimizar sus procesos, generar más rentabilidad y mejorar sus costos, sino, además, guiar sus procesos estratégicos de Protocolo Familiar y Plan de Sucesión, a través de una metodología basada en el acompañamiento de un coach que facilite el proceso y realice los pasos clave para un proceso planeado, y como se mencionó antes, lograr preservar la unión familiar y el éxito empresarial por muchos años.
Written by: Manuel Romero | Director of Diagnosis and Operations